domingo, 14 de marzo de 2010

Esa gente tan especial, esa que nunca te va a abandonar


A cualquier precio, los hinchas están. En Santa Fe, y también en Entre Ríos, porque hubo quienes llegaron el viernes y rodearon la zona del hotel como un peregrino lo hace con su religión. Gimnasia, el Lobo, los Triperos, esos nombres propios que identifican a la hinchada sufrida como ninguna otra de la Primera División.
Micros de filiales y agrupaciones fueron los vehículos de la pasión platense, aunque los autos confortables sirvieron para llegar con goce de estadía incluida, ya que no fueron pocos los que viajaron un día antes y se terminarían yendo el día después (aprovechando paisajes y la costa paranaense).
Estuvieron colgando los trapos habituales detrás de uno de los arcos, o en realidad a un costado donde se amontonó el clamor azul y blanco. “Javi”, “Paulo”, “Parque San Martín”, “Plaza España”, “Berisso”, “Ensenada”, las leyendas más visibles, además de una bicolor -amarilla y naranja- que pertenece a La 22 de Crucero del Norte, equipo misionero que participa en el torneo Argentino A y cuya barra se bautiza igual a la gimnasista.
La gente de Gimnasia, el grupo de infaltables que planifica viajes sin importar tanto otros asuntos personales, se volvió mascullando el gol perdido por Chirolita al final, pero consolados por el puntito que los sigue alimentando en estas odiseas por salir del fondo.