Una vez dijeron de alguien “pobrecito” así con tono de lástima y alguien preguntó: ¿Pobrecito porque? Tiene dos piernas, dos brazos, ve, oye, esta vivo… Y es así.
Pensemos Triperos:
¿Se nos borró la franja azul del pecho blanco? No.
¿Nos tiraron abajo nuestro estadio y pusieron un baldío donde van los travestis por la noche? No.
¿Nos prohíben cantar y alentar y ponen multas impagables a los terremotos producidos por gritos de gol? Tampoco.
¿En la tribuna miramos para todos lados y sólo vemos botineras, vestidas como para sábado a la noche, fans de jugadores que van a sentarse de local y no van de visitante salvo que las cosas vayan bien? Tampoco.
¿Entonces…?
Pero claro, yo digo esto y perdió Gimnasia y está mal en el promedio. Y esto, por esa pasión que llevamos a cuestas, lo vivimos como un drama. Es así. Innegable. Algunos protestones, demasiado en algunos casos, otros envueltos con banderas, otros que saltan y cantan, pase lo que pase. Pero perdió Gimnasia y entonces el dolor de la rodilla jode un poco más, y uno se fastidia por cualquier cosa y lo que en otro momento nos resbalaría ahora nos molesta. Y uno se olvida que tiene sus dos piernas, sus dos brazos, ve, oye, puede cantar y por sobre todo, no nos han podido borrar la franja azul del pecho blanco, tenemos nuestra casa y las ganas de ampliarla a nuestra manera, tenemos la tribu de nuestro barrio que sigue siendo mayoritariamente azul y blanca, estamos vivos, a pesar de todo.
Desde el fatídico día que el Lobo puso su garra fuera del Bosque hasta el momento no hubo una sola alegría destacable en lo deportivo. Ni clásico, ni mucho menos. Es más, a partir del uso del estadio trucho, los vecinos comenzaron esos festejos de bocinas caras y remeritas último modelo y cuál desfile de Giordano en Punta del Este, se sientan a festejar triunfos, allí en 25 y 32.
Palos y palos hemos recibido en los últimos años, en un lomo de fierro, que sigue aguantando los golpes. Alguien me envió un correo y me preguntaba ¿castigo o maldición?...no, ninguna de las dos cosas, creo que son causas de todo aquello.
Maldición…pareciera que sí. Cuando no juega Chirola por tarjeta amarilla, el árbitro adiciona 6 minutos, y si no se lesiona Niell, y otro árbitro, en otro partido, le saca roja a Rinaudo y después Villar se lesiona feo... Y lo que era el segundo gol de Gimnasia pega en el travesaño, como había pasado con Central en el Bosque. Cambia técnico Racing y viene “el envión anímico” y los resultados, y lo cambia Central y pasa lo mismo, y el Kily justo regresa tras meses de ausencia contra nosotros, ha pedido de su hinchada, mete un gol y ahora: San Lorenzo con técnico nuevo. Y así podemos seguir bastante tiempo. La conclusión es obvia, no ligamos una a favor. Y esas cosas pasan y cuando vienen todas juntas (para bien o para mal) no son aciertos o desaciertos de una sola causa o persona. Obvio que la suerte influye. Y ante este granizo de mala suerte, lo que no tiene que cambiar es la marcha, la unión. Las películas de terror siguen existiendo, solo porque los “buenos” no se mantienen unidos. ¿No? Bueno, en Gimnasia, en esta coyuntura, donde salimos uno para cada lado, estamos listos. Nos devora el monstruo de la desesperación.
Pero como dije antes, que nadie se equivoque, que no manden coronas antes de tiempo, ni sonrían escondidos…porque estar golpeado no significa estar muerto, porque si hay dolor, es que aún sentimos y si sentimos, estamos vivos, hay posibilidades de pelear. Y en eso de pelearla, la tenemos más o menos sabida.
Porque tenemos una historia que nos dice que a las desgracias las agarramos del cogote y las metemos en el lago del bosque, un par de veces, para que se transformen en alegría.
Porque es lindo ser de Gimnasia.
Y una última cosa, una anécdota: De un guionista inglés que se fue a Hollywood, y pasó muchos años de penurias, vivía en una pensión de mala muerte junto a coreógrafos, actores, que tenían un mismo sueño: triunfar en lo suyo. Pasaron años así, comiendo lo justo, siendo desconocidos. Un buen día uno, luego otro, empezaron a cobrar fama, a ganar mucho dinero y hasta algún premio. Pero el grupo, según contaba este guionista, se seguía juntando cada tanto y cenaban y se quedaban hasta la madrugada riendo mientras recordaban. ¿Lo saliente de esto? Lo marcaba él mismo: - Qué curiosa es la vida, cuando estábamos muertos de hambre en la pensión, soñando vivir mejor, ser respetados, conocidos, y con dinero en el bolsillo, nunca imaginamos esto: ahora que tenemos autos, casas enormes, choferes, fama, y trabajo, nuestros mejores tesoros, que nos siguen despertando risas y emoción, son los recuerdos de aquellos tiempos difíciles.
Tenemos en estos tiempos que parecen duros, jodidos, la oportunidad de ayudar a remontar, de mostrar que somos guapos de verdad, de frente, que somos Hinchas como se debe ser y que nuestros sueños nos unen y vamos a salir adelante.
Un día vamos a estar festejando en 60 y 118, renovado, amplio, todo lleno de socios triperos y gritando por un equipo surgido del semillero, que estará agradecido al club y diremos: ¿te acordás las épocas difíciles? ¿Te acordás que íbamos igual a todos lados, que gritábamos que vengan al bosque que los esperamos cuando quieran?
¡Qué lindo poder decir!: Nunca dejamos de ser nosotros. Nunca cambiamos nuestros colores que son un poco, nuestra forma de ser.
Y pienso en el 26 de Febrero del 2003, Nose si te acordás: las 22 luces nuevas del mayor estadio de la ciudad, 34.000 triperos saltando y gritando en el primer partido en La Plata por la Copa Libertadores de nuestra historia, en nuestra casa. 5 a 1. Goleada. Fuegos artificiales. Un periodista deportivo peruano comentó: “Alianza Lima deberá pasar una durísima prueba esta noche, porque es la primera fase y sin embargo se nos hace muy difícil creer que este encuentro no sea una final, cuando observamos las gradas, y vemos la gente de Argentina, su entusiasmo, el apoyo que le brindan a su equipo”.
Así lo vivimos. Despertando admiración por nuestra entrega. Vamos a ser parte de esa historia en estos tiempos difíciles. Las leyendas de la mejor hinchada del mundo te está dando una oportunidad, ser vos también un protagonista.
Vamos Lobo. La fecha que viene y siempre. Vamos Lobo. Vamos a alentar que todos somos el lobo. Amén.
Rafael Ton.
Nauseabundos sin rumbo ni destino 
Psicóticos esperando un destino
Incesantes sin freno hacia el final
Bondadosos de su causa y de las otras 
Quebrados de amor y de amores 
Tesoreros de riquezas sin dinero
Liberales esperando nuevas guerras 
Laboriosos con certezas que desconocen. 
Enfermos que disfrutan su enfermedad
